....."… - Voy a cumplir cien años, y he visto cambiar todo, hasta la posición de los astros en el universo, pero todavía no he visto cambiar nada en este país –decía- . Aquí se hacen nuevas constituciones, nuevas leyes, nuevas guerras cada tres meses, pero seguimos en la Colonia …"


viernes, 8 de agosto de 2008

About a girl

Subte, Línea D, estación Plaza Italia. Yo me bajo ahí, ella sigue dos mas.
En Caterdral hablamos, "sos mi argentino preferido". Tardó en venir. Besos, caricias, dos días sin dormir, mucho dolor de cabeza.
Llegó, subimos. No quería que llegue, no quería subir. Pero llegó y subimos. Ahí terminó todo, cuando arrancó empece a temblar, ya no había regreso.
Casi no hablamos, solo pequeñas cosas, distracciones que no significaban nada. Yo no quería hablar, estaba en el borde, una palabra de mas y se me caían las lágrimas.
Llegamos a Agüero, "mirá, tu vieja parada". Me miró triste, yo sonreí, pero estaba aún mas triste que ella.
Ya no quise hablar mas. Antes de llegar me iba a decir algo, le tapé los labios con mis dedos para que no hable, no quería escuchar palabras de despedida, y mucho menos decirlas. Se resistió. Por suerte, dijo cualquier otra cosa.
No hablamos mas. Solo miradas, solo caricias, solo besos. Yo seguía temblando por dentro, cada vez peor. Llegamos.
Subte, Línea D, estación Plaza Italia. Yo me bajaba ahí.
Un abrazo, un beso enorme. Te quiero. Yo también. Nos vemos.
Mis manos en sus mejillas. Otro beso. Todavía veo esa mirada.
Me bajé rápido, mirando para adelante. Los sábados tarda un poquito mas en irse de las estaciones. Llegué a los pies de la escalera, paré y me di vuelta hacía el tren. No se habían cerrado las puertas, y yo ya estaba llorando. Se cerraron, se fue. No lo podía creer, se fue.
Subí a la realidad. Mi cara, empapada. Subía un chico grande llorando por las escaleras del subte, todos miraban, nadie entendía nada.
Agarré por Santa Fe, doblé en Borges, me senté en la puerta del edificio. Me calmé y toque timbre. Subí, nadie se dio cuenta. Dejé todo tirado, fui a la cocina, y estallé otra vez. "¿Que pasa Fede?". "Se fue, Juampi, no lo puedo creer". Otro abrazo, tan lindo como inesperado.
Me calmé, o algo parecido. Llagaron los demás, llegaron los actores. Armé la puesta, empezó el rodaje. "¿Luz?, ¿Cámara?… Acción."




Me miró a los ojos, profundamente, y puso otra vez esa carita de pícara, esa sonrisa maliciosa; sabía, desde antes de decirlo, que, como casi nunca, me iba a dejar callado.
- Besaste a una Yankee, ¿dónde están tus ideales?, me dijo.
Sonreí. No había respuesta posible. Solo sonreí, y la besé de nuevo.





2 comentarios:

Anónimo dijo...

No vì luz y subì pero se me encendio la làmpara interna y pasè a ver si habìas hecho algo con todo èsto.
Prendè la luz que anda todo bastante oscuro por acà.
Mucho SUBTE, mucho EXTRANJERO suelto por Buenos Aires.
Ayyyy NOELIO NOELIO ...

Unknown dijo...

Recien te estaba insultando por no darte cuenta de un tema de la radio, como me voy a inspirar ahora para escribir algo copado??? jajaja
Pibito querido, que el camino a transitar por el blog sea un camino de ida. Que no haya ataques de Emo y si los hay que se vuelquen repentinamente en textos sanadores.
Que la palabra sea mas fuerte que el fusil y que la poesia le gane a la guerra.
Yo estoy convencido de que eso es posible.
Un abrazo grande